Hacía una semana desde que habían comenzado a ensayar seriamente otra vez, debían estar preparados para la nueva tanda de conciertos que darían en la ciudad y los alrededores. Estaba cada uno en su ubicación dentro de la pequeña sala de ensayos de la casa. Tocaban Now or Never. Minutos más tarde terminaron el ensayo con One of a Kind.
            
-Estuvo genial el ensayo, chicos. Estoy seguro de que la próxima semana será nuestra –dijo el líder soltando una risa contagiosa.
             
Jonghyun no dejó de mirarlo siquiera cuando iba a dejar su guitarra en su lugar. No podía evitar sentirse animosamente contagiado por la alegría que irradiaba el mayor en esos momentos.
             
-Creo que todos esperamos lo mismo, Yong –dijo Minhyuk abrazándolo por los hombros.
             
-Por supuesto que sí –se les unió Jungshin, abrazándolos a ambos. - ¡Hey, Jonghyun! No seas así, únetenos – regañó el menor a Jjong, acercándolo al abrazo grupal, dejándolo justo en frente de Yonghwa.
             
Qué tortuosos se le hacían ahora esos momentos de cercanía. Pensar que antes simplemente disfrutaba de ellos y ahora sólo lo hacían incomodarse le causaba una sensación que bordeaba los nervios y la risa. Ahora que había conseguido más, ahora que sabía que era correspondido no se sentía conforme con esos acercamientos de compañerismo y amabilidad. Ahora siempre querría aún un poco más, no podía conformarse con aquello, y eso lo hacía ruborizarse por lo demandante y posesivo que podía ser internamente con el mayor, aunque nunca le dijera nada, aunque no se atreviera siquiera a pedirle ninguno de los gestos que tanto ansiaba.
             
Minhyuk deshizo el abrazo apelando a que ya lo estaban sofocando, causando la risa de los demás y la pronta disolución del enlace.
             
-¿Qué les parece si hacemos algo hoy por la noche? –preguntó Yonghwa con ese tono alegre que ya se había apoderado de su ánimo.
             
-Algo como ¿qué? –le escrutó Jungshin.
             
-Mmm... Podríamos beber algo... soju, tal vez. Nunca lo hacemos y no le veo lo malo.
             
-Sí... me parece –le convino Jonghyun a su lado.
             
-Ok, entonces. Minhyukkie, Jungshinnie, ustedes se encargarán de ir a comprar –anunció el mayor.
             
-¿Nosotros? Pero si siempre vamos Jungshin y yo a comprar... –refunfuñó Minhyuk.
             
-No te preocupes, iremos nosotros -dijo Jjong palmeando el hombro del líder, quien lo miró con cara de pocos ánimos.

* * *

-¿Por qué tuvimos que venir nosotros? Jungshin no se hubiera negado y Minhyuk hubiera terminado accediendo de todos modos –apeló el mayor cuando iban de regreso a casa.
            
-Porque de vez en cuando es bueno salir a caminar, además podemos aprovechar de que a estas horas no anda mucha gente en la calle y no habrá quien nos acose ni flashes de cámaras dándonos en el rostro. –Le contestó en una sonrisa.
             
-Mmm... eso es cierto.
             
-Por supuesto. Es lindo poder caminar tranquilos por la calle, como antes. ¿Recuerdas?
             
Yonghwa se rió en señal de que sí lo hacía.
             
¿Cómo podía olvidarse de aquellos tiempos en que la banda era apenas un proyecto y ellos eran unos completos desconocidos para todas esas personas que ahora los seguían fervientemente coreando sus canciones?
             
De pronto, simplemente por impulso, tuvo el deseo de juntar la mano de Jonghyun a la suya, y luego de cerciorarse que no había nadie en los alrededores, resbaló sus dedos entre los del menor y apretó suavemente sus manos. Jonghyun lo miró confundido y una sonrisa tímida se asomó en sus labios.
             
Fue esa sonrisa la que le quitó el aliento a Yonghwa y, como una descarga de valentía, le obligó a abusar del agarre de sus manos para guiar al castaño hasta un callejón cercano, acorralarlo contra la pared, tomar su rostro y besarlo de un modo que no había hecho sino hasta ahora.
            
De un modo que se le antojo el mejor de su vida, y que nubló los pensamientos del menor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario